Poniendo nuestro esfuerzo (como aquellos panes y peces) en las manos de Jesús, podremos saciar todas las hambres de sentido en nuestra comunidad. Si bien nuestro pan es insuficiente, en la manos de Jesús cuando pasa por el altar de la Iglesia, es suficiente, alcanza y sobra. (Padre José Manuel 'Sejo' Díaz Cantero - Pentecostés 2010)
domingo, 12 de septiembre de 2010
Cita para meditar
Oh Dios, ¡pon en mí un corazón limpio!, ¡dame un espíritu nuevo y fiel! (Salmo 51:10)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario